México se quedó cerca del milagro y por momentos hizo soñar a la afición con una victoria épica e histórica, porque nunca antes había ganado por goleada en una Copa del Mundo.

El Tri llegó a Qatar 2022 con poca expectativa de éxito por el futbol que desplegó en los últimos dos años, pero el Mundial es un torneo corto en el que todo puede cambiar y en las cuentas del Tri estaba ganar o empatar ante Polonia, perder o empatar contra Argentina y ganarle a Arabia Saudita.

Todo se cumplió, pero quedó fuera por diferencia de goles, aunque a lo largo del torneo se presentaron una serie de sucesos que culminaron con el fracaso de la Selección Mexicana.

El camino al fracaso inicia contra Polonia

En el balance final del debut del Tri en Qatar 2022 la memoria el penalti que le atajó Guillermo Ochoa a Robert Lewandowski, pero México no tuvo llegada y se fue sin gol, porque nunca encontró la manera de hacerle daño a Polonia.

Contra los polacos fue evidente que se extrañaron variantes ofensivas, que el técnico Gerardo Martino dejó fuera de la convocatoria y a los que llevó no tenían ritmo o dejó de confiar en ellos, en concreto Raúl Jiménez está lejos del nivel que lo hizo un incondicional, después, Rogelio Funes Mori no fue tomado en cuenta.

A la par del 0-0, en el otro choque del grupo Argentina perdió contra Arabia Saudita, lo que movió por completo la ecuación, que pese a que al final no trascendió, sí que lo hizo en el segundo duelo, ya que la Albiceleste se jugaba la permanencia contra México.

Planteamiento temeroso contra Argentina

En el segundo partido el Tata Martino salió con una línea de cinco que si bien tenía practicada en los entrenamientos, cuando salió así en un partido fue goleado por Uruguay. Inexplicable que dejara en la banca a Edson Álvarez.

Ya en la cancha, el planteamiento le alcanzó una hora hasta que Héctor Herrera se olvidó de Lionel Messi y el '10' de Argentina aprovechó el error y vacunó a Guillermo Ochoa, quien de acuerdo a una crítica de Iker Casillas, pudo hacer más para detener el disparo.

Lo peor no fue el gol, sino que México no tuvo reacción, no hubo capacidad de respuesta y por segundo partido no generaron llegadas.

El Tata mandó a la cancha a Chucky Lozano y Alexis Vega, sin un centro delantero, pero los dos terminaron ahogados, sólo corrieron y no pudieron acercarse a la portería del Dibu Martínez.

En un torneo en el que la diferencia de goles puede ser el factor decisivo, después Érick Gutiérrez se fue con una finta y Enzo Fernández marcó un golazo para caer 2-0, mientras en el otro duelo, Polonia ganaba por el mismo marcador y complicaba la última jornada.

Szczesny fue factor para eliminar a México

Aunque Szczesny no fue clave contra México, le detuvo penaltis a Arabia Saudita y Argentina, con lo que impidió un par de goles que pudieron cambiar el destino del Tri.

En la última jornada, la Selección Mexicana llegó con un pie fuera del Mundial y se quedó cerca del milagro, al mostrar su mejor cara y romper la sequía goleadora.

El Chucky Lozano dio el encuentro que quedó a deber en sus primeros partidos, Henry Martín por fin anotó y Luis Chávez marcó un golazo que por momentos hizo soñar con la hazaña, pero el portero Al Owais tapó un par de llegadas claras y, mientras México buscaba una anotación para meterse en octavos, recibió un tanto Salem Al Dawsari que terminó con el sueño.

En este encuentro los cambios del Tata no agradaron, sacó a Alexis Vega y Orbelín Pineda para el segundo tiempo, que se mostraron bien al ataque, en su tercer cambio metió a Raúl Jiménez y pareció que México se quedaba con 10, por la falta de ritmo.

En el otro partido, Argentina ayudó poco, sólo ganó 2-0 y faltó un tercero, que pudo marcar Lionel Messi, pero falló el penalti con una atajada clave de Szczesny.

De alguna manera, con esta falla, Messi eliminó a México en una pequeña venganza ante las amenazas del Canelo Álvarez.

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